1) Se la extraña a la Virgen Atea. Tres días que no la veo y
casi que me vuelvo ateo...
2) En fin, soy feliz a pesar de todo: River campeón de América,
Papa argentino y amistad con la mujer más hermosa, buena, sensual y dulce del
mundo: la Virgen Atea. Ayer pasé la tarde con ella. Luego me fui a la
Biblioteca Nacional a leer a Céline. Mientras caminaba bajo la lluvia y miraba
el Museo Nacional de Bellas Artes, di gracias a Dios por tener una vida tan
maravillosa. Esa mujer me llena de energía. Falta que gane Daniel Scioli en
octubre y ya está, cocinado el pollo. Vuelvo: decía que me sentí de maravillas
ayer por la tarde. Es preciosa la Argentina. A pesar de que tenemos una
sociedad materialista, también heredamos una tradición social y libertaria muy
interesante: un ciruja como yo está próximo a recibirse en la universidad
pública de Perón. Y puedo ir a leer a la biblioteca más importante de mi país
sin poner un peso. Me siento orgulloso de haber nacido en Buenos Aires. Tengo
todo lo que quiero, pese a todos esos machos chacalazos fatales que quieren
destruirme suicidio mediante. Me chupa un huevo sus grandes pijas, sus tarjetas
de crédito y sus coches último modelo...
3) Estas reflexiones me las regaló mi mejor amiga, aquella chica
cuyo único defecto es tener novio. Ella es la persona que tanto afecto me
inspira y por la cual siento tanto agradecimiento. Es, también, una suerte de
madre adoptiva. Desde que la conozco, siempre ha estado en todo y me ha
perdonado más de una vez. Es una persona excelente. Tal vez no debería
expresarme de esta manera en un texto público pero considero que es una forma de
sincerarme. En verdad, siento rechazo por la mayoría de las mujeres pero ella
es una excepción: valoro su mentalidad viril, su lealtad y perseverancia, su
sacrificio en el día a día y la alta moral que la guía en todos sus pasos. La
mayor parte de las hijas de Eva se entregan a frivolidades, mentiras, engaños,
infidelidades y otras banalidades como las peleas de chongos a la salida de los
boliches. Bueno, ella no. Es una verdadera excepción al paradigma del nefasto
sexo femenino. La Biblia dice, en palabras de Salomón, que no hay siquiera una
sola mujer buena. Yo puedo decir que la hallé y que me brinda una amistad
sincera, incondicional y desinteresada. Muchas gracias a vos por haberme
sostenido en mis días más difíciles, días y noches en los cuales gente de mi
"familia" me ha dejado tirado, y por ser el viagra que me levantó el
ánimo en los momentos imposibles. Sos la tipa ideal. Dios quiera que seas muy
feliz y que te vaya bien en esta vida.
4) Por otro lado, quiero decir que la bondad no está reñida con
el ateísmo. Por eso sos y serás mi dulce Virgen Atea. Muchas personas que se
llenan la boca hablando de Dios me han dado la espalda mientras que vos
recogiste el guante y me rescataste de mi ocaso. Nunca me voy a olvidar de vos.
Te debo la vida.
5) ¿Así que el próximo eclipse como el de ayer va a ser en
2033? Bueno, Dios quiera que vuelva a ser con vos, solcito mío. Hasta entonces.
6) Lo mejor del eclipse de ayer fue que me encontró junto a la
Virgen Atea mirando el cielo desde un balcón...
7) Me dijeron que hay que darle el Premio Nobel de la Paz a la
Virgen Atea por su frase de cabecera: "¡Basta Alan!" Muy buena.
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